En la mayoría de los baños de países europeos tales como España, Portugal, Francia e Italia te encontrarás con una cierta instalación sanitaria que parece una combinación de taza de baño con lavabo: esto se llama bidé (o en francés “bidet”) .
En ciertas casas pasa que, cuando vas al baño, te encuentras con tres cosas: la taza de baño, el bidé y el lavabo (e incluso si el baño es más grande, hasta la tina de baño está ahí), por lo que causa confusión y curiosidad saber qué es y para qué sirve el bidé.

El propósito del bidé es limpiarte esas partes íntimas después de haber hecho del baño. Una razón lógica del por qué utilizar el bidé es que a veces el papel higiénico puede no ser suficiente para limpiarte bien y no siempre puedes bañarte después de ir al baño.
Las principales partes de tu cuerpo que puedes limpiarte en el bidé son:
- Tus pies. En ocasiones puedes llegar a tu casa (o sitio de alojamiento) de la playa o simplemente fuiste a pasear con tus pies descalzos y crees que ir a bañarte puede ser una exageración. Pues en el bidet te puedes enjuagar los piecitos.
- Tu asterisco. Alguna vez, después de haber hecho del baño, te limpias y te limpias y sientes que nunca vas a terminar? Vas a ir a algún evento formal o a una cita y quieres asegurarte de ir con el asterisco bien limpio? Entonces por qué no bañarte? Bueno, igual y eso puede tomar tiempo e incluso parecerte innecesario. Entonces por qué no utilizar … ¡el bidé! Simplemente siéntate en el bidé, abre la llave y lávate con jabón esa(s) parte(s) de tu cuerpo que quieres que quede(n) limpia(s).
- Tus genitales. Sí, adivinaste. Antes y después del sexo.
Cabe recordar que el bidé no debe utilizarse en lugar de la taza de baño.
Sin embargo, el bidé no es frecuentemente utilizado por la gente excepto bajo ciertas circunstancias especiales. Por ejemplo, para el caso de las mujeres, cada mes…
En resumen, el bidé sirve para esas limpiezas que de otra manera hacércelas en la regadera serían una exageración.